sábado, 27 de octubre de 2012
TEORÍA DEL ORIGEN COMÚN
La Eva Mitocondrial o La Eva Negra
Eva mitocondrial habría sido una mujer africana, que según la teoría genetista, correspondería en la evolución humana al ancestro femenino que poseeía las mitocondrias del cual descienden todas los mitocondrias de la población humana actual. Por ello, si seguimos la línea genealógica por vía materna de cada persona en el árbol genealógico de toda la humanidad, Eva mitocondrial correspondería a un único antepasado femenino de la que diverge toda la población actual de Homo sapiens (seres humanos).
Así como las mitocondrias se heredan por vía materna, los cromosomas se heredan por vía paterna. Por lo tanto es válido aplicar los mismos principios con estos. El ancestro común más cercano por vía paterna ha sido apodado Adán cromosomal-Y. Sin embargo, es muy importante aclarar que no vivió en la misma época que la Eva mitocondrial. Por el contrario, su existencia fue por lo menos 50 mil años más reciente.
TEORÍA DEL ORIGEN COMÚN
Cuanto más pequeña es una población, más rápidamente converge el ADN mitocondrial; las migraciones de pequeños grupos de personas derivan (Deriva genética) luego de unas pocas generaciones hacia un ADN mitocondrial común. Esto sirve como sustento a la teoría del origen común (Single-origin hypothesis en inglés). Esta teoría plantea que los seres humanos modernos (Homo sapiens) se originaron en África entre los 100.000 y 200.000 años.
Los humanos modernos se originaron en África hace 200.000-250.000 años, comenzando a emigrar de ese continente desde hace 100.000 y 60.000 años. Las especies que habitaban ya fuera de África (Homo erctus y Neanderthal), también tuvieron su origen común africano, seguramente del Homo ergaster. Se supone que el Homo sapiens fue reemplazando a H. erectus y H. Neanderthal progresivamente.
Para más información: http://www.mundohistoria.org/blog/articulos_web/adn-mitocondrial-origen-del-homo-sapiens - autor: Gaetano Laspina
lunes, 22 de octubre de 2012
DOCUMENTAL: "LA CONQUISTA DE LA TIERRA"
Presentado por el paleoantropólogo y director del yacimiento de Atapuerca, Juan Luis Arsuaga. (Duración: 6 partes, 14 minutos c/u. Total: 1 hora, 24 minutos).
YACIMIENTOS DE HOMO SAPIENS NEANDERTALES EN ESPAÑA
Arqueólogos trabajando en el yacimiento de Pinalla del Valle |
"El valle de Lozoya, en la sierra madrileña de Guadarrama, bien podría llamarse el valle de los neandertales, dice el paleontólogo Juan Luis Arsuaga. “Está protegido por dos cuerdas de montañas, rico en fauna, ecológicamente privilegiado e ideal para los neandertales, un buen cazadero para ellos”. No es una hipótesis: en los yacimientos de Pinilla del Valle, junto al pantano, se han encontrado ya nueve dientes de neandertal, restos de fogatas y miles de fósiles de animales, incluidos enormes uros (cada uno mide como dos toros), rinocerontes y gamos, entre otros.
“En España hay una quincena de yacimientos de esa especie —en la Cordillera Cantábrica, Levante y Andalucía—, pero ninguno en la meseta, donde no hay formaciones de calizas y, por tanto, no hay cuevas adecuadas que pudieran preservar los vestigios humanos durante miles de años”, añade Arsuaga. Pero Pinilla del Valle es la excepción. “Aquí sí hay calizas. Era como una visera de piedra en la que los neandertales se cobijarían a preparar la caza, tallar herramientas, comer... no es que vivieran dentro, en el sentido de vivienda; ellos vagaban por el campo y esto sería más bien un campamento en el que refugiarse cuando lo necesitaban”.
“El yacimiento, con mucho potencial, se extiende unos 150 metros de distancia y ahora estamos trabajando en tres zonas: la cueva del Camino, el abrigo de Navalmaillo y la cueva Des-Cubierta, con tres rangos temporales distintos”, comenta Enrique Baquedano, director del Museo Arqueológico Regional, de la Comunidad de Madrid. Y recalca el peculiar nombre, con guion, jugando con la idea de la cueva descubierta y a la vez con su descripción física: un alero rocoso que se desplomó dejando la superficie destapada."
- Alicia Rivera para "El País", Madrid. 09/10/12.
Para más información visite: http://sociedad.elpais.com/sociedad/2012/09/09/actualidad/1347213778_215274.html
lunes, 15 de octubre de 2012
AUSTRALOPITHECUS AFARENSIS *Información Básica*
AUTRALOPITHECUS AFARENSIS
Australopithecus afarensis fue un hominino que vivió entre los 3,9 y 3 millones de años antes del presente. Era de contextura delgada y grácil, y se cree que habitó sólo en África Oriental (Etiopía, Tanzania y Kenia). Es aceptado entre la mayoría de la comunidad científica que puede ser uno de los ancestros del género Homo.
Fue descubierto el 24 de noviembre de 1974 por Donald Johanson, Yves
Coppens y Tim White en Hadar, Etiopía. El espécimen encontrado en aquel
momento fue el mundialmente conocido como Lucy (en la imagen).
Este descubrimiento destacó sobre los demás por muchas cualidades, especialmente por ser el Australopithecus mejor conservado a través de tantos años. Así fue posible comprobar que su capacidad para caminar erguido, como los humanos actuales, precedió al crecimiento del cerebro. El estudio de su dentadura aclaró aspectos fundamentales sobre la evolución de los homininos y descubrió la evolución simultánea de géneros, de manera que la línea Paranthropus se apartó de otras y en particular de la que evolucionó hacia Homo.
Los restos de Lucy fueron encontrados en el lugar donde habitaba la tribu Afar, de ahí el nombre afarensis, y junto con otros doce individuos de la misma especie, incluido cráneos, conforman lo que se llama "la primera familia".
Australopithecus afarensis es, como todo Australopithecus, un primate bípedo erguido, pero diferente a nosotros en varios aspectos:
A diferencia de los antropomorfos, los caninos de Australopithecus afarensis
son reducidos aunque se proyectan ligeramente delante del diente
adyacente. Los incisivos son grandes (asociados al régimen frugívoro).
Los molares y premolares son de tamaño sustancial, con superficies
planas.
De su boca también se concluye que el paladar es muy similar al del hombre actual porque, aunque grande, forma una curva que no es parabólica, ni de lados paralelos, como en los grandes simios.
La forma de la pelvis es importante ya que de ella se han realizado estudios necesarios para determinar el caminar bípedo erguido de los Australopithecus; es de pequeño tamaño en comparación a la de los antropomorfos y presenta un canal de parto, en la hembra, más pequeño que el actual y con una notoria forma de riñón. Las hembras de la especie no necesitaban tener un gran canal de parto, debido al pequeño tamaño del cráneo de las crías.
Australopithecus afarensis fue un hominino que vivió entre los 3,9 y 3 millones de años antes del presente. Era de contextura delgada y grácil, y se cree que habitó sólo en África Oriental (Etiopía, Tanzania y Kenia). Es aceptado entre la mayoría de la comunidad científica que puede ser uno de los ancestros del género Homo.
Este descubrimiento destacó sobre los demás por muchas cualidades, especialmente por ser el Australopithecus mejor conservado a través de tantos años. Así fue posible comprobar que su capacidad para caminar erguido, como los humanos actuales, precedió al crecimiento del cerebro. El estudio de su dentadura aclaró aspectos fundamentales sobre la evolución de los homininos y descubrió la evolución simultánea de géneros, de manera que la línea Paranthropus se apartó de otras y en particular de la que evolucionó hacia Homo.
Los restos de Lucy fueron encontrados en el lugar donde habitaba la tribu Afar, de ahí el nombre afarensis, y junto con otros doce individuos de la misma especie, incluido cráneos, conforman lo que se llama "la primera familia".
Australopithecus afarensis es, como todo Australopithecus, un primate bípedo erguido, pero diferente a nosotros en varios aspectos:
- Capacidad craneal bastante menor: 375 a 550 cm3. Esto significa un cerebro de un tamaño cercano a la tercera parte del humano actual promedio.
- Australopithecus afarensis era un hominino con frecuente actividad arbórea, ya sea recolectando frutos, durmiendo, jugando, etc.
- Su pecho no era en forma de barril, como el nuestro, sino que se estrechaba agudamente hacia arriba (forma de campana).
- El dimorfismo sexual era muy marcado, con los machos mucho más corpulentos que las hembras.
Reconstrucción de Australopithecus afarensis.
De su boca también se concluye que el paladar es muy similar al del hombre actual porque, aunque grande, forma una curva que no es parabólica, ni de lados paralelos, como en los grandes simios.
La forma de la pelvis es importante ya que de ella se han realizado estudios necesarios para determinar el caminar bípedo erguido de los Australopithecus; es de pequeño tamaño en comparación a la de los antropomorfos y presenta un canal de parto, en la hembra, más pequeño que el actual y con una notoria forma de riñón. Las hembras de la especie no necesitaban tener un gran canal de parto, debido al pequeño tamaño del cráneo de las crías.
LAS PISADAS O ICNITAS DE LAETOLI
Las Pisadas de Laetoli.
Las icnitas de Laetoli se formaron sobre cenizas muy finas expulsadas por el volcán Sadimán hace 3,6 millones de años. Tras la erupción llovió (hay marcas de gotas de lluvia) y el suelo se humedeció. Los homínidos y otros animales pasaron y dejaron su rastro. El sol salió y secó rápidamente los rastros y, dado el alto contenido en carbonatos, se endureció como el cemento. Cayeron otras capas de cenizas hasta cubrir unos 16-20 centímetros y las huellas quedaron enterradas y conservadas.
Presentan un patrón morfológico totalmente humano. El golpe de
talón está muy marcado, el dedo gordo está completamente alineado al
resto de los dedos y el arco plantar medial está bien desarrollado. Las
relaciones espaciales entre las huellas presentan un patrón
sorprendentemente humano (distancia entre las pisadas, orientación de
las mismas, etc.).
Se distinguen tres rastros de pisadas. En los años setenta del siglo XX se descubrieron rastros de dos individuos desplazándose hacia el norte. Son dos rastros paralelos, separados entre sí 25 centímetros, demasiado próximos para dos personas caminando una al lado de la otra. Es posible que siguieran el mismo camino pero que no se produjeran de forma simultánea, dado que las condiciones de ambos rastros son algo diferentes. El primero de los rastros (conocido como rastro G-1), el de pies más pequeños, presenta los contornos nítidos, como si se hubieran formado sobre una superficie firme y compacta (húmeda), mientras el rastro del pie mayor (rastro G-2) tiene los contornos más difusos y agrandados, como si se hubieran producido más bien sobre una superficie seca y polvorienta. El rastro G-1 parece detenerse a mitad de camino, dar media vuelta hacia la izquierda, y volver a retomar el camino inicial.
No fue hasta después cuando los investigadores se dieron cuenta de que el rastro situado más al este (rastro 2) representaba huellas superpuestas de dos individuos: G-2 la más profunda y G-3 la más superficial.
A partir de las huellas se han hecho estimaciones de la estatura, pero con varios presupuestos de partida:
Este rastro permite estudiar el tipo de locomoción de los homininos que lo produjeron. En las huellas de Laetoli, como en las de un humano actual, la transmisión del peso empieza en el talón, sigue a lo largo del borde exterior y termina en el pulgar, como cabría esperar en un bípedo.
En este yacimiento (Laetoli) se han encontrado restos fósiles de Australopithecus afarensis, lo que permite especular con bastante confianza que individuos de esta especie son los autores de las huellas.
Las icnitas de Laetoli se formaron sobre cenizas muy finas expulsadas por el volcán Sadimán hace 3,6 millones de años. Tras la erupción llovió (hay marcas de gotas de lluvia) y el suelo se humedeció. Los homínidos y otros animales pasaron y dejaron su rastro. El sol salió y secó rápidamente los rastros y, dado el alto contenido en carbonatos, se endureció como el cemento. Cayeron otras capas de cenizas hasta cubrir unos 16-20 centímetros y las huellas quedaron enterradas y conservadas.
Se distinguen tres rastros de pisadas. En los años setenta del siglo XX se descubrieron rastros de dos individuos desplazándose hacia el norte. Son dos rastros paralelos, separados entre sí 25 centímetros, demasiado próximos para dos personas caminando una al lado de la otra. Es posible que siguieran el mismo camino pero que no se produjeran de forma simultánea, dado que las condiciones de ambos rastros son algo diferentes. El primero de los rastros (conocido como rastro G-1), el de pies más pequeños, presenta los contornos nítidos, como si se hubieran formado sobre una superficie firme y compacta (húmeda), mientras el rastro del pie mayor (rastro G-2) tiene los contornos más difusos y agrandados, como si se hubieran producido más bien sobre una superficie seca y polvorienta. El rastro G-1 parece detenerse a mitad de camino, dar media vuelta hacia la izquierda, y volver a retomar el camino inicial.
No fue hasta después cuando los investigadores se dieron cuenta de que el rastro situado más al este (rastro 2) representaba huellas superpuestas de dos individuos: G-2 la más profunda y G-3 la más superficial.
A partir de las huellas se han hecho estimaciones de la estatura, pero con varios presupuestos de partida:
- Los homininos de Laetoli tienen las mismas proporciones del pie que los humanos modernos.
- Los individuos representados son adultos.
- Las pisadas son buenos indicadores del tamaño del pie.
Este rastro permite estudiar el tipo de locomoción de los homininos que lo produjeron. En las huellas de Laetoli, como en las de un humano actual, la transmisión del peso empieza en el talón, sigue a lo largo del borde exterior y termina en el pulgar, como cabría esperar en un bípedo.
En este yacimiento (Laetoli) se han encontrado restos fósiles de Australopithecus afarensis, lo que permite especular con bastante confianza que individuos de esta especie son los autores de las huellas.
AUSTRALOPITHECUS AFRICANUS *Información Básica*
Australopithecus africanus.
De acuerdo con los estudios dentales realizados, Australopithecus africanus procede de Australopithecus afarensis y hasta no hace mucho se creía que abría una línea evolutiva hacia el género Paranthropus, en tanto que otra línea, que también procede de Australopithecus afarensis, estuvo representada por Homo habilis y culminó en el Homo sapiens.
Entre las características se resalta la forma de caminar bípeda, común a todos los homininos. Tenían actividad arbórea en forma activa. Su peso promedio oscilaba entre los 33 y 67 kilogramos, con una estatura de 1,50 metros de alto.
Su cara, desde un punto de vista general, es más corta. Presenta
menor prognatismo (la mandíbula está adelantada con respecto al
maxilar), unido a un menor tamaño de piezas dentales. Éstas no se
diferencian mucho de las del humano. Los caninos eran pequeños, sin
sobresalir como en los antropomorfos, y los incisivos eran tan pequeños
como los nuestros. También es importante mencionar que desaparece el
diastema (separación entre incisivos), o es muy rara su existencia. Por
tanto, notamos una reducción de caninos e incisivos y hay un mayor
énfasis de la masticación en el resto de la dentadura.
Para más información: http://evolucionhumana.freehostia.com/contenido.php?contenido=2
Sus características óseas son de gran importancia para diferenciarse del resto de Australopithecus: su capacidad craneana es de 480 a 520 cm3. Su caja craneal es más alta y redondeada que la de los antropomorfos, y su esqueleto postcraneal similar al del Australopithecus afarensis.
Australopithecus africanus es una especie de hominino fósil de Sudáfrica, datado en unos 5 millones de años. La historia de Australopithecus africanus
como especie reconocida data de 1924, cuando fue descubierto por
Raymond Dart en Taung, Sudáfrica, el cráneo de un niño conocido como el Niño de Taung. Pero no fue tomado en cuenta hasta 30 años después.
De acuerdo con los estudios dentales realizados, Australopithecus africanus procede de Australopithecus afarensis y hasta no hace mucho se creía que abría una línea evolutiva hacia el género Paranthropus, en tanto que otra línea, que también procede de Australopithecus afarensis, estuvo representada por Homo habilis y culminó en el Homo sapiens.
Entre las características se resalta la forma de caminar bípeda, común a todos los homininos. Tenían actividad arbórea en forma activa. Su peso promedio oscilaba entre los 33 y 67 kilogramos, con una estatura de 1,50 metros de alto.
Para más información: http://evolucionhumana.freehostia.com/contenido.php?contenido=2
EAST SIDE STORY
East Side Story
East Side Story es una hipótesis propuesta por Yves Coppens en 1994 que intenta explicar la aparición de los homínidos bípedos.
Esta hipótesis se basa en los siguientes hechos:
La hipótesis ha sido criticada tras el hallazgo de los fósiles de Australopithecus bahrelghazali en el Chad, al oeste del valle del Rift, así como de restos de homínidos supuestamente bípedos no asociados a ecosistemas abiertos (Orrorin tugenensis, Sahelanthropus tchadensis, Ardipithecus).
Para más información: http://evolucionhumana.freehostia.com/contenido.php?contenido=2
East Side Story es una hipótesis propuesta por Yves Coppens en 1994 que intenta explicar la aparición de los homínidos bípedos.
Esta hipótesis se basa en los siguientes hechos:
- La zona oeste de África comprendida entre el océano Atlántico y el valle del Rift está poblada por ecosistemas selváticos, mientras que en la zona al este del valle del Rift hasta el océano Índico predominan los ecosistemas de sabana.
- Los homínidos bípedos más antiguos se han hallado al este del valle del Rift.
La hipótesis ha sido criticada tras el hallazgo de los fósiles de Australopithecus bahrelghazali en el Chad, al oeste del valle del Rift, así como de restos de homínidos supuestamente bípedos no asociados a ecosistemas abiertos (Orrorin tugenensis, Sahelanthropus tchadensis, Ardipithecus).
Para más información: http://evolucionhumana.freehostia.com/contenido.php?contenido=2
lunes, 1 de octubre de 2012
PRINCIPIOS
LOS PRIMATES
Para los paleontólogos, el punto de inicio de la historia de la humanidad empezó con la aparición de los primates, hace unos 65 millones de años. Los primeros de ellos eran unos pequeños seres que empezaron a vivir en los árboles en lugar de permanecer en el suelo, como la mayoría de los mamíferos. Entre las especies que pertenecen a los primates están, además del ser humano, los simios, monos y musarañas. Durante su desarrollo evolutivo, estos primates se hicieron de ciertos rasgos especiales: buena visión, manos con las que se pueden sujetar firmemente objetos y un cerebro relativamente grande.HOMÍNIDOS
Por pertenecer a la misma familia, las diferentes especies de primates, en especial monos y simios, guardan similitud con el ser humano. Según algunos estudiosos, el último ancestro común entre el ser humano y el chimpancé, nuestro primo más cercano, existió hace 6 ó 7 millones de años. Después de esta separación apareció el primer homínidos, el llamado Australopithecus, que posteriormente dio lugar al Homo habilis, el primer especímen del género Homo, al que pertenecemos los seres humanos modernos.
Los cambios en la biología de los primates que desembocaron en los primeros homínidos se dieron en África: en el Este y en el Sur. El cañon de Olduvai, en Tanzania, el noreste de Africa, es uno de los lugares donde se han encontrado los fósiles más antiguos que aportan datos sobre la historia evolutiva del ser humano.
Los límites que señalen el comienzo y el final de los distintos homínidos no son exactos, se calcula que aparecieron hace 4.5 millones de años y se extinguieron hace unos 2 millones de años. Durante mucho tiempo debieron coexistir diferentes tipos, y el final de una especie se entremezcló con las generaciones de otra en el transcurso de miles de años.Para más información: http://redescolar.ilce.edu.mx/redescolar/act_permanentes/historia/histdeltiempo/mundo/prehis/t_evolu.htm
Los científicos distinguen entre varias especies de homínidos. Todos ellos comparten algunas características básicas:
Pueden mantenerse erguidos y caminar en dos pies
Tienen un cerebro relativamente grande en relación con el de los monos
Su mano tiene un dedo pulgar desarrollado que les permite manipular objetos.
NOTICIA: Descubren Mutación Genética Que Favoreció el Movimiento de los Homo Sapiens
"Tres equipos científicos estadounidenses que han analizado patrones de variación genética en diferentes poblaciones han dado con una mutación, que debió producirse hace más de 85.000 años, y que permitiría a los Homo sapiens del centro de África migrar por todo el continente. La mutación está en un grupo de genes del cromosoma 11 implicados en al conversión de ácidos grasos poliinsaturados de origen vegetal en ácidos poliinsaturados necesarios para aumentar el tamaño del cerebro, su complejidad y sus funciones, según explican los investigadores, que logran así asociar la base genética con la llamada gran expansión africana del Homo sapiens.
Diversas investigaciones genéticas y arqueológicas apuntan hacia el origen del Homo sapiens hace unos 180.000 años, pero permanecerían confinados unos 100.000 años en una zona con abundantes lagos en el centro de África, según explican los investigadores del Centro Médico Wake Forest Baptist que forman uno de los tres equipos de la investigación, presentada en la revista Plos One y liderada por Joshua M. Akey (Universidad de Washington). Su hipótesis es que este confinamiento territorial se debió, al menos en parte, a que los humanos primitivos necesitaban, para alimentar sus funciones cerebrales, un ácido graso específico (DHA) que contienen los peces. Y en la región centroafricana habría agua y, por tanto, fuentes de alimentos con DHA."
Para más información visite: http://sociedad.elpais.com/sociedad/2012/09/20/actualidad/1348165762_938962.html
NOTICIA: Descubrimiento Nuevo sobre los Neandertales
"Un estudio internacional en el que ha participado el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha confirmado que los homo sapiens neanderthalensis usaban plumas de aves rapaces y de córvidos para fines ornamentales. (...) Esta teoría destierra la idea de que los neandertales no poseían pensamiento simbólico y los acerca más al Homo sapiens sapiens. La investigación se suma así a otras recientes que han apuntado también la existencia para el Hombre de Neandertal de un mundo simbólico, de cultos y ritos chamánicos. (...) La investigación se ha centrado en el estudio de los restos óseos de 21 especies de rapaces y córvidos encontrados en tres cuevas de Gibraltar.Los análisis de estos restos demuestran que de 124 individuos, al menos 18 presentaban en sus alas marcas de herramientas neandertales e incluso de dientes. Según ha explicado el investigador del CSIC Juan José Negro, de la Estación Biológica de Doñana, estas extremidades "están destinadas a funciones de vuelo, son muy ligeras y apenas tienen carne, por lo que creemos que no tenían un fin alimenticio, sino que empleaban las enormes plumas como ornamentación, tal y como siguen haciendo muchos pueblos indígenas en la actualidad". Los restos analizados proceden de diferentes estratos arqueológicos que abarcan miles de años y han sido comparados con datos de otros 1.700 yacimientos de Eurasia procedentes del Pleistoceno. Los resultados ponen en evidencia que la manipulación de plumas por parte de los neandertales "era una práctica extendida" y que no pudo ser una pauta aprendida del Homo sapiens, ya que las muestras son anteriores a la llegada de éstos a Gibraltar. (...) El trabajo revela, asimismo, que los neandertales preferían las aves planeadoras con grandes plumas de color oscuro, como el quebrantahuesos, el buitre leonado, el milano real o el águila real.Los investigadores apuntan, como causa de esta elección, el hecho de que gran parte de las aves encontradas formaban parte de la vida diaria de los neandertales."
Para más información visite: http://sociedad.elpais.com/sociedad/2012/09/17/actualidad/1347907471_767289.html
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